El Ayuntamiento de Oviedo no contempla el impacto de la pandemia en los criterios para adjudicar las becas escolares

El Ayuntamiento de Oviedo aprobó el jueves los criterios y cantidades que regirán la adjudicación de las becas escolares para el curso 2021-22 con una convocatoria que no contempla la situación económica sobrevenida debido a la pandemia. Paradójicamente, y pese a que en la exposición de cantidades y criterios realizada por el gobierno municipal aparece un incremento del dinero disponible respecto al año anterior, esa disponibilidad no se traducirá automáticamente en un aumento del número de familias que recibirán ayudas debido al mecanismo de valoración aprobado.

Sorprende que la fuente utilizada para conocer los ingresos de las familias sea la declaración de la renta de 2019, el ejercicio anterior al impacto de la pandemia en la economía. La situación de todas aquellas personas que hayan perdido sus empleos o hayan visto reducidos sus ingresos desde el pasado mes de marzo no computará a la hora de adjudicar las becas escolares. Oviedo terminó 2020 con 16.759 personas desempleadas, un 17,7% de su población activa. El desempleo ha aumentado en la ciudad en un 12% el año pasado y, ni para los nuevos desempleados ni para los autónomos que han visto desplomarse su actividad, se ha contemplado criterio alguno. Es muy posible que se queden fuera de la posibilidad de recibir becas escolares.

Los problemas no terminan aquí. Un comparación de las becas escolares concedidas en los cursos 2019-20 y 2020-21 desvela que el dinero destinado al pago de estas ayudas disminuyó el año pasado en un 20%. También que el ayuntamiento ha pasado de conceder el 82% de la ayudas solicitadas a reconocer sólo el 52%.

La incorporación del bipartito de Partido Popular y Ciudadanos al gobierno municipal ya supuso un cambio en el parámetro utilizado para decidir quienes tienen derecho a beca escolar. Del criterio seguido por el tripartito, que partía del índice de pobreza de Eurostat se pasó a utilizar el IPREM (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples). Al hacerlo, bajó en un 13% la cantidad a partir de la cual se adquiere el derecho a beca escolar. El resultado es que continúan recibiendo becas las familias de menores ingresos pero la clase media precarizada se queda fuera. Como se quedarán fuera muchas personas que hayan perdido sus empleos o hayan visto disminuidos sus ingresos en el último año.