Rubén Rosón, concejal y médico residente en el HUCA, pide al bipartito que al menos 5 millones se destinen a gasto social
Oviedo tiene una oportunidad de oro para hacer frente a los efectos del coronavirus con medidas sociales: 70 millones de euros procedentes del remanente de tesorería que el Gobierno bipartito tiene paralizados. La primera petición para que ese dinero se destine a paliar los efectos de la crisis del coronavirus ha llegado desde la oposición. Que se destinen al menos 5 de los 70 millones del superávit a gasto social para ayudar a las familias es la petición que ha lanzado al bipartito el concejal y médico residente en el HUCA Rubén Rosón, de Somos. “En este momento de extrema dificultad el Gobierno de España permite utilizar los superávit para inversión social. Sería algo imperdonable disponer de ese dinero y no ponerlo al servicio de los vecinos y vecinas de Oviedo”, ha manifestado.
Una petición que parece razonable, teniendo en cuenta la situación actual y que el Ayuntamiento de Oviedo tiene retenido una cantidad importantísima de dinero a la que no ha dado salida alguna. Los últimos planes del bipartito pasaban por meter esos 70 millones en el banco a plazo fijo durante dos años, pero finalmente solo han conseguido colocar en una cuenta (y sin rendimiento alguno) 5 millones de euros, por lo que aún están disponibles 65 millones de euros.
“Pedimos al bipartito que ponga a disposición de la ciudadanía el dinero del remanente de tesorería que pretendía dejar a plazo fijo en el banco y por el que ni siquiera sacaría rendimiento. Son 70 millones de euros que pertenecen a la ciudadanía y solamente inviertiendo 5 millones ayudaría a revertir los recortes que hicieron y a mejorar la situación de las familias, los autónomos que han tenido que cerrar sus negocios y a las personas más vulnerables que están sufriendo en estos tiempos tan difíciles”, ha reflexionado el concejal Rubén Rosón.